Un reporte realizado por investigadores del Foro Internacional de Transporte (ITF, por sus siglas en inglés) evidenció que el mejor uso que se le puede dar a los electrocombustibles (e-fuels) es en el sector de aviación y transporte marítimo.
Los e-fuels son combustibles producidos estrictamente a partir de energía renovable. Un ejemplo es el hidrógeno verde (H2V), que es creado a partir de energías verdes, como la solar o la eólica, de ahí su nombre.
Este fue uno de los temas abordados en el Foro Internacional de Transporte 2024, realizado en la ciudad de Leipzig, Alemania, del 22 al 24 de mayo. En este foro, distintos ministros se unieron para encontrar soluciones a problemáticas del transporte, siendo una de ellas la descarbonización del mismo.
En este foro, Andreas Kopf, analista del ITF, resaltó la importancia del potencial que tienen los e-fuels para lograr un transporte con menos emisiones en los sectores más difíciles de descarbonizar.
Es por ello que, en el mismo informe, se señaló la necesidad de la intervención de los gobiernos para que estos combustibles tengan precios más competitivos en el mercado.
A pesar de todo lo positivo que tienen los electrocombustibles, Kopf consideró que es muy probable que sean escasos en el futuro debido a que no existirán suficientes plantas de producción. Por esta razón, en el reporte recomiendan que la aviación y los barcos de carga tengan prioridad al emplear esta nueva tecnología.
Usualmente, cuando se habla del transporte, se piensa en los automóviles y en la movilidad terrestre, sin embargo, el tema es mucho más amplio. Es por eso que también se debe tomar en cuenta el sector aéreo y el marítimo, ya que son igual de importantes de descarbonizar que el terrestre.
¿Por qué estos sectores y no el transporte terrestre?
Kopf consideró que los electro combustibles tendrán un gran rol para la descarbonización de la economía y las industrias de transporte, principalmente en caso de la aérea y la marítima.
“Las emisiones globales de dióxido de carbono (CO2) del transporte aéreo son de aproximadamente 3% y las embarcaciones 3% también. Ese porcentaje puede parecer pequeño, pero no lo es y esta es la única manera de descarbonizar estos sectores”, apuntó Kopf.
Esta unión de transportes -aéreo, marítimo y terrestre- hace ver que no existe una única solución, sino que se necesita un conjunto de tecnologías para poder vivir en armonía con el planeta. Aún así, no deja de ser válido preguntarse porqué los investigadores consideran que los electro combustibles deben destinarse a las aeronaves y los barcos.
“Habrá una gran necesidad de descarbonizar la aviación y las embarcaciones en específico. Estos son los sectores donde más necesitamos los electro combustibles, y el progreso ha sido bastante lento porque la mayoría de estas plantas de producción aún no existen”, señaló Kopf.
Actualmente, los proyectos están en sus primeras etapas. Aún se está tratando de avanzar en el Nivel de Maduración Tecnológica (TRL, por su siglas en inglés) para poder usar los electro combustibles a gran escala en el futuro, comentó el analista.
Kopf consideró que se deben priorizar estos sectores debido a la gran cantidad de energía que utilizan. El potencial de los e-fuels es bastante alto, pero por el momento no existe una amplia producción, lo que significa que no hay suficiente para todos los medios de transporte.
“El problema de los e-fuels es que van a ser extremadamente escasos en el futuro cercano, debido a la poca producción para uso a gran escala. Es por eso que la prioridad deben ser los sectores que no se pueden descarbonizar de otra forma”, añadió Kopf.
A diferencia de los aviones y barcos, los automóviles y los camiones sí tienen otra alternativa. Esta es la electrificación de sus motores para que no sean de combustión interna, lo cual ayuda a reducir significativamente las emisiones.
“Es una muy mala idea colocar el hidrógeno verde en los autos, porque es mucho más eficiente utilizarlo a nivel global que en las actividades del día a día. Se generan menos emisiones de CO2 si se usa la electrificación en el transporte terrestre directamente en vez del hidrógeno”, aseguró el analista del ITF.
¿Qué son los electro combustibles?
Los e-fuels tienen la ventaja de que pueden tener subproductos que también serían combustibles renovables. Por ejemplo, el H2V se puede transformar en amoniaco verde, también está el queroseno sintético (E kerosene, como se le llama comúnmente en inglés), el cual -según Knopf- se puede convertir en metano renovable.
El queroseno sintético se ha postulado como un combustible ideal para realizar viajes aéreos con cero emisiones, ya que las aeronaves no requieren grandes cambios para utilizarlo. Alemania, en el 2021, construyó la primera planta en el mundo para la producción de este electro combustible.
Según Kopf, generalmente se puede distinguir entre los combustibles a base de carbono, los sintéticos y los que del todo no usan carbono. Los primeros son los fósiles convencionales, pero los sintéticos son los que utilizan el carbono del aire para su producción.
Por último, están los que no utilizan carbono del todo, estos son como el H2V, porque el carbono no está presente en ninguna parte de su vida, por lo que tampoco lo emiten a la atmósfera cuando se usa.
“El problema aquí, es que para recuperar el CO2 del aire o para producir hidrógeno con un electrolizador, se necesita mucha energía”, señaló el analista, refiriéndose a las complicaciones que presentan actualmente los electro combustibles.
¿Cómo pueden ayudar los gobiernos?
Para nadie es difícil notar que la transición hacia la descarbonización ha sido lenta y, según Kopf, esto se debe a que los e-fuels son significativamente más caros que los combustibles convencionales.
Esto se traduce en que las empresas siempre van a preferir mantener la menor cantidad de costos posibles para sus operaciones. Si utilizan combustibles más caros, este aumento en los gastos se pasaría a los consumidores.
“Es por esto que es particularmente importante tener regulaciones que fuercen a la industria marítima y de aviación a aumentar progresivamente el uso de estas tecnologías. Porque esto da seguridad operacional para quienes manufacturan estos combustibles, porque saben que si van a vender sus productos”, añadió Kopf.
Las inversiones para estas tecnologías son bastante caras, señaló el analista, y es por eso que los costos son altos. Por ello, para abaratar el precio es necesario que los productores tengan certeza de que las empresas comprarán sus productos y de esta manera las inversiones serán menos riesgosas y más económicas.
Otra acción que pueden tomar los gobiernos es disminuir los precios de los e-fuels como un incentivo o elevar el precio de los combustibles convencionales por medio de impuestos. Esto equilibraría la balanza y haría que los costos sean más competitivos.
“Llegar a un acuerdo en los precios es extremadamente importante para reducir la diferencia de costos que existe entre los e-fuels y los combustibles convencionales”, comentó Kopf.
El analista recomendó a Costa Rica que, para incentivar a las compañías a producir e-fuels, el gobierno garantice que por los próximos 10 años se va a comprar una determinada cantidad de combustibles. Esto se puede hacer por mandatos hacia las aerolíneas, lo cual incentivaría la demanda.
Para producirlos se necesitan grandes cantidades de energía, pero específicamente tiene que ser renovable. Afortunadamente, Costa Rica tiene una matriz eléctrica con más del 90% de electricidad renovable, esto le otorga una ventaja importante para desarrollar e-fuels.
Este reportaje fue hecho en el marco del ITF 2024. Ojo al Clima asistió al evento al ser nominado al premio de periodismo del ITF “Transporte y movilidad en Latinoamérica”.