La cantidad de siniestros atendidos dentro de áreas silvestres protegidas (ASP) se redujo de 67 a 23 casos en comparación con el 2020. Además, el total de área con terreno boscoso que fue afectada es la menor de las últimas 10 temporadas.
Así lo dieron a conocer las autoridades del SINAC-MINAE cuando presentaron los resultados estadísticos de la temporada de incendios forestales 2021.
Una comparación de las temporadas 2020-2021 revela que el daño sufrido por las ASP en el primer ciclo fue de 1.371 hectáreas. Sin embargo, en el presente año, se redujo a solamente 845 hectáreas. Esto equivale al menor registro en cuanto a área afectada dentro de las ASP en las últimas 24 temporadas. Para observar un dato similar hay que retroceder algunas décadas cuando, en 1999, se generó un daño en 857 hectáreas.
La región Chorotega fue donde se presentó el mayor número de hectáreas afectadas por los siniestros, dentro y fuera de ASP. Específicamente, el fuego se ensañó con el Área de Conservación Tempisque (ACT), el Área de Conservación Guanacaste (ACG) y el Área de Conservación Arenal Tempisque (ACA-T).
¿Por qué ocurrió esta disminución?
Hay varios motivos, entre ellos sobresale que, en el 2021, el SINAC-MINAE contó con el apoyo y participación de 815 personas altamente capacitadas y entrenadas para llevar a cabo acciones de extinción.
Además, las lluvias atípicas que se dieron en el territorio nacional durante abril ayudaron a reducir la incidencia de los accidentes, esto siendo uno de los meses catalogados como “más críticos”.
Luis Diego Román Madriz, coordinador del Programa Nacional de Manejo del Fuego del SINAC-MINAE, indicó que -aunque esta temporada fue muy positiva- el país tendrá temporadas más críticas debido al cambio climático, el cual está modificando la estructura y condiciones de la vegetación, ocasionando que esta arda con una mayor facilidad.
Asimismo, se debe destacar el “compromiso, trabajo y atención en la detección oportuna” de las quemas presentadas a nivel nacional por parte de los bomberos forestales institucionales del SINAC, voluntarios y brigadas contratadas.
Quemas
A nivel nacional, las quemas durante el 2021 damnificaron 21.836 hectáreas. Esto representa una disminución de 11.070 hectáreas en relación con las cifras presentadas en la temporada 2020 (32.906 hectáreas).
Guanacaste, Puntarenas y Alajuela son las tres provincias con mayor registro de hectáreas dañadas por las quemas. Mientras que los diez primeros cantones afectados son los siguientes: Liberia (9.820 hectáreas), Santa Cruz (4.534 hectáreas), La Cruz (2.905 hectáreas), Carrillo (2.406 hectáreas), Bagaces (1.200 hectáreas), Cañas (520 hectáreas), Nicoya (363 hectáreas), Nandayure (311 hectáreas), Osa (169 hectáreas) y Los Chiles (155 hectáreas).
Por otra parte, en el informe se revelan datos favorables en cuanto a la protección de terrenos de propiedad privada, patrimonio natural del Estado y territorios indígenas.
En total se atendieron 88 incendios forestales, 23 en ASP y 65 en propiedades privadas, terrenos de patrimonio natural del Estado, territorios indígenas y zona marítimo terrestre. Como referencia, se apagaron 149 siniestros en este tipo de propiedades en el 2020.
Los tipos de vegetación más perjudicados, a nivel nacional, fueron las áreas bajo proceso de regeneración natural (tacotal y charral) con un total de 9.455 hectáreas; seguidas por las áreas con pasto y otras con combinación de pasto con árboles con 9.210 hectáreas.
Las quemas agropecuarias y de pastos (31%) siguen ubicándose como la segunda causa del fuego, solo precedida por acciones de vandalismo, venganza y actividades de caza (34%), y seguida por cambio de uso del suelo (13%) y la quema de residuos forestales (8%).
La temporada 2021 finalizó oficialmente el pasado 15 de junio.