El Consejo Municipal del cantón de Osa añadió el pasado 9 de noviembre dos artículos a su plan regulador que obligan a las empresas a dejar de usar plástico de un solo uso y a reciclar sus residuos sólidos.
“La idea es, desde el Gobierno local, involucrar a comerciantes y a otros sectores que no están representados en la cámara para que se sensibilicen y se involucren” indicó el alcalde de Osa, Alberto Cole.
Según la municipalidad del cantón, en un primer trimestre, motivarían a los patentados a que firmen un convenio y adquieran un compromiso con erradicar los plásticos de un solo uso.
En el segundo trimestre, la municipalidad tendría que analizar y evaluar los avances obtenidos y en el tercer trimestre, el gobierno local en conjunto al Ministerio de Salud, modificaría sus patentes y permisos de salud para obligar a la eliminación de estos plásticos.
“La idea es que tanto las personas que compran como las que lo venden (principalmente los almacenes) eliminen el plástico y promuevan el uso de productos alternativos”, señaló Luis Centeno, presidente Cámara de Turismo de Osa (Catuosa) a Ojo al Clima.
Según dijo Centeno, estos artículos serían un instrumento esencial para lograr reducir los impactos de las empresas en el ambiente.
“Estábamos seguros de que nuestros objetivos no eran posibles si no teníamos un respaldo de un Concejo Municipal aplicando modificaciones en los reglamentos” señaló Centeno.
Estos artículos se sumaron al plan regulador del cantón en el marco de la campaña “Osa libre de plástico”. Esta campaña, liderada por Catousa, la Municipalidad de Osa y la Fundación Corcovado, arrancó el año pasado con el objetivo de eliminar pajillas, removedores, bolsas plásticas y estereofón en el cantón.
Luego de un año de su comienzo, Catousa indicó que un 96% de sus asociados han logrado reducir “la mayor parte” de sus productos de plástico desechable, principalmente en pajillas y estereofón.
Proteger la biodiversidad
Según Centeno la medida sería, además, beneficiosa para el turismo de la zona, ya que protegería la biodiversidad del cantón al reducir la contaminación y las emisiones de gases de efecto invernadero.
“Sabemos que Osa es reconocido como un destino “verde” y, como “verde” que somos, todos los involucrados debemos comprometernos en campañas como esta, porque es una necesidad”, expresó el presidente de la Cámara de Turismo de Osa.
Laura Dos Santos, Coordinadora del Programa de conservación de Tortugas Marinas de Fundación Corcovado aseguró, en un comunicado, que el mayor peligro para la supervivencia de esta especie son los plásticos de un solo uso, que terminan en los océanos y que son consumidos por esta y otras especies marinas.
Además, los artículos ayudarían a disminuir la huella de carbono del cantón. Un reciente estudio de la Universidad de Hawai indica que la producción de plásticos representa “una fuente poco conocida” de potentes gases de efecto invernadero como el metano, que calentaría la atmósfera hasta 80 veces más que el carbono.
Este cantón, además, es particularmente vulnerable a los impactos del cambio climático. En el sector Bahía Ballena, por ejemplo, el aumento del mar amenaza al Parque Nacional Marino Ballena, el tercero más visitado del país.