Unas 100.000 personas tuvieron una muerte prematura en 2015 en el sudeste de Asia debido al humo de los gigantescos incendios de bosques intencionales que fueron registrados en Indonesia, según un estudio publicado el lunes.
Investigadores de las universidades estadounidenses de Columbia y Harward afirman en el estudio que se registraron 91.600 muertes prematuras en Indonesia, 6.500 en Malasia y 2.200 en Singapur, dos países vecinos.
Con estos datos, los enormes incendios forestales del 2015 en Indonesia se transforman en una de las peores catástrofes ambientales de la historia y una muestra clara del vínculo entre impacto al medio ambiente y afectaciones a la salud humana.
Las estimaciones de esta investigación contrastan notablemente con las últimas estadísticas de las autoridades indonesias que daban cuenta de 19 muertos en 2015.

Según el sitio especializado Climate Home, estos incendios provocaron 50 veces más muertes que el huracán Katrina, que impactó la costa sur de Estados Unidos y la ciudad de Nueva Orleans en 2005.
"Estas comparaciones son inadecuadas, pues esta catástrofe es completamente un desastre causado por el hombre", explicó el sitio.
Durante décadas, los bosques tropicales de Indonesia y otras partes del mundo han sido derribados para hacer paso a cultivos agrícolas, plantaciones forestales y largas extensiones de palma aceitera.
Un reporte de FAO señaló que un 70% de la deforestación en América Latina entre 2000 y 2010 ocurrió para abrirle paso a la agricultura comercial. Ese mismo informe apuntó que Costa Rica maneja mejor el balance entre cultivos agrícolas y protección forestal.
Las condiciones especialmente secas de El Niño 2015 en el archipiélago de Indonesia se prestaron para que en miles de puntos se iniciaran fuegos de manera intencional.

El estudio publicado en la revista Environmental Research Letters combina datos de satélites con una modelización del impacto de la exposición al humo y de las tasas de contaminación medidas en los países concernidos.
"Si nada cambia, el humo mortal va a continuar teniendo terribles repercusiones año tras años", advirtió Yugun Indradi, de Greenpeace Indonesia.
Diversas estimaciones señalan que los incendios forestales del 2015 en Indonesia contribuyeron con un 3% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero de ese año y costaron $16.100 millones a la economía de ese país.
Además, una tercera parte de los orangutanes del mundo –que tienen su hábitat natural en los bosques de Indonesia– estuvieron en peligro por los incendios forestales.
El ministerio indonesio de Medio Ambiente, interrogado por la AFP, no formuló por el momento ninguna opinión sobre el informe.
Este estudio "revolucionario" aporta datos detallados sobre la cantidad de muertes atribuidas a los incendios de bosques el año pasado, indicó Greenpeace, que agrega que se trata de "estimaciones prudentes".
Los incendios forestales consumieron unas 2,6 millones de hectáreas de bosques tropicales en 2015 en Indonesia.
Los incendios criminales apuntan a desbrozar y fertilizar tierras para desarrollar las plantaciones destinadas al aceite de palma, del cual Indonesia es el primer productor mundial.